Un parque infantil para los niños con discapacidad visual también recibió un galardón en los Premios MINI de Diseño
MARÍA EIMIL
Majada Rurbana Inland y Parque Constanz son los dos proyectos reconocidos con un galardón en los Premios MINI de Diseño de Madrid Design Festival. Estos galardones reconocen la actitud creativa de todos los profesionales que orientan su trabajo a mejorar la vida en las ciudades.
Majada Rurbana Inland es una infraestructura agroecológica trashumante que consta de elementos móviles y replicables interrelacionados: establo, unidad móvil, aula quesería, estación de radio, cabaña-habitat de pastor y almacén de forraje para el pastoreo urbano. El objetivo de este espacio, reconocido con el premio en la categoría Profesional (dotado con 15.000 euros y el uso de un MINI durante un año) es dar cobijo a las ovejas cuando duermen y, al mismo tiempo, convertirse en un aula bosque, donde se imparten talleres en torno al pastoreo urbano para familias y colegios. Este proyecto de Campo Adentro se encuentra en la Casa de Campo de Madrid, pero según indica la gestora cultural Amelia López Aranguren, hay otros parques de Madrid que están deseando contar con rebaños y convertirse en un lugar de formación para la ciudadanía.
Además, otro proyecto que obtuvo un reconocimiento en los Premios MINI de Diseño, aunque en este caso en la categoría de nuevos talentos, dotada con 4.000 euros, fue el Parque Constanz, ideado por Ana Hernando, alumna de la Universidad Francisco de Vitoria. Este proyecto nace de la necesidad de familias y niños con discapacidad de disfrutar de parques infantiles. El objetivo es contribuir al desarrollo social a través de estos espacios plenamente integradores.