Los peliqueiros de Laza, una muestra de artesanía tradicional

El peliqueiro es mucho más que un disfraz, es un sentimiento


MARÍA EIMIL


Las campanadas de fin de año anuncian la llegada del Entroido en Laza, una fiesta llena de ritos y personajes ancestrales que recorren las calles de esta localidad ourensana. El personaje principal son los peliqueiros, una figura cuyo origen es incierto, pero que en su atuendo, que no disfraz, simboliza el poder religioso, judicial y social y es toda una muestra de artesanía, ya que se elabora a mano, siguiendo el método tradicional.

Desde el primer día del año, tras el anuncio de la llegada de los carnavales, cada viernes los jóvenes recorren las calles de la localidad haciendo sonar los chocos (similares a los cencerros), tambores, latas, sartenes o cualquier otra herramienta que permita hacer ruido. Es el llamado folión, que consiste en prender fuego a unos manojos de paja y recorrer las calles del municipio mientras los vecinos tiran ceniza desde las ventanas para simbolizar un rito ancestral, ya que creían que el fuego purificaba la tierra y alejaba a los malos espíritus.

Desde fin de año, cada viernes los jóvenes recorren las calles de la localidad haciendo sonar los chocos

Foto: Adobe Stock

Más que un disfraz, un sentimiento

Tras los cuatro viernes de folión comienzan los días grandes del Entroido en Laza, en los que la plaza de la Picota se convierte en el centro neurálgico de la localidad. La aparición de los peliqueiros se produce siempre durante el domingo de Carnaval, tras la Misa, cuando recorren la villa en grupo imponiendo su ley. Aunque está permitido insultarles, nunca se debe tocar ni ensuciar su atavío. Y es que ser peliqueiro es mucho más que ir disfrazado o caracterizado, es un sentimiento.

El lunes de Carnaval, conocido en Laza como el Día da Borralleira se celebra la Farrapada, una batalla de trapos untados en barro. Ya por la tarde baja desde Cimadevila la Morena, otro personaje típico del carnaval lazano, un hombre cubierto con una manta y con una cabeza de vaca que se dedica a levantar las faldas de las mujeres y que lanza hormigas vivas a los que se encuentran en la plaza.

La máscara, elemento fundamental del atuendo

El traje del peliqueiro de Laza puede pesar hasta 15 kilos y la máscara es una pieza fundamental. El atuendo está compuesto por una camisa blanca, una chaquetilla corta con aplicaciones de terciopelo granate, charreteras de corte militar, un calzón corto de lino decorado con encaje y flecos de colores y un cinturón con dos grandes cencerros para hacer el mayor ruido posible, entre otros elementos.

El traje de peliqueiro puede pesar hasta 15 kilos

Desde el Museo del Traje, donde se encuentra un ejemplar del atavío de peliqueiro, recuerdan que la máscara “está formada por tres piezas: la máscara en sí o careta, la pantalla y la piel que cubre la pantalla en su parte trasera, denominada pelica, y que hace la función de casquete, lo que permite que se ajuste a la cabeza”. La máscara es de madera tallada y policromada y en ella se representa la cara, muy cómica, de un personaje caracterizado por una gran sonrisa que deja ver la hilera superior de los dientes, por unos coloretes rojos circulares, y por un fino bigote con perilla.

La máscara es de madera tallada y en ella se representa la cara del personaje, caracterizado por una gran sonrisa

Las máscaras fustigadoras y el triángulo mágico de Galicia

La pelica, la piel que cuelga de la parte posterior de la máscara, es otro elemento fundamental, ya que diferencia al peliqueiro de otros personajes típicos del entroido en Galicia, como los cigarróns de Verín, que también son máscaras fustigadoras. Estos personajes tienen el privilegio de perseguir y golpear con la pellica o látigo a la gente sin que esta pueda replicar. En el Entroido de Laza, los peliqueiros portan zamarras (similar a un látigo que cuenta con un mango de madera y que utiliza para abrirse camino, saludar y castigar).

Peliqueiro de Laza
Antiguamente la pelica de la máscara era una piel de gato, hoy en día en la mayoría de los casos es sintética |Foto: Adobe Stock

Como mencionábamos anteriormente, la piel de animal que cuelga tras la parte trasera de la máscara diferencia a este personaje de los cigarróns. Junto a estas dos figuras también hay que destacar las pantallas de Xinzo, ya que estas tres localidades forman el llamado triángulo mágico de Galicia.

Las pantallas de Xinzo, los peliqueiros de Laza y los cigarróns de Verín: las caras del entroido en Galicia

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