La agencia coruñesa Kindergarten diseñó para Tahona esta atrevida campaña que se desarrolló durante las Navidades y a la que se sumaron muchos otros negocios locales
PABLO LÓPEZ
El concepto tradicional de una campaña publicitaria lleva a pensar que el fin de la misma es proclamar las virtudes de los productos y del buen hacer de la empresa que la pone en marcha, pero ¿por qué no romper moldes y ensalzar los artículos de negocios de la competencia? Esa pregunta es la que se hicieron la agencia coruñesa Kindergarten y la cadena de panaderías Tahona antes de poner en marcha una campaña navideña en la que destacaban la calidad del roscón de Reyes de la confitería Glaccé, las milhojas de la pastelería Berna o la crostata de Habaziro.
El objetivo último de la campaña, al margen del de llamar la atención que se ha conseguido con creces, es el de promover el consumo en los negocios locales. “Vamos a llenar nuestras tiendas y calles de A Coruña con mensajes sobre los productos que más nos gustan de otras panaderías y pastelerías locales. Ojalá esto ayude a reflexionar, a todos los que nos vean, acerca de la importancia de estar unidos y de la fuerza que tienen nuestras decisiones como consumidores para construir la sociedad que queremos y merecemos”, explicaban desde Kindergarten sobre esta rompedora campaña.
La campaña de Tahona también pretende mostrar que no es necesario poner a la propia marca en el centro de la campaña y que reconocer lo que otros hacen bien es un buen camino para entrar de lleno en el imaginario de la gente. “En vez de hacer la típica campaña hablando bien de nosotros mismos, hacemos una campaña hablando bien de los demás, poniendo en valor los maravillosos productos que cada día elabora nuestra competencia y animando a la gente a comprarlos”, apunta la agencia Kindergarten.
Participación de otros establecimientos locales
Si de algo se sienten especialmente orgullosos los responsables de la campaña diseñada para Tahona es del hecho de que otros muchos negocios locales se sumaran a la iniciativa con mensajes en los que alababan la calidad de los productos de otros comercios y establecimientos.
“La Saporita, por ejemplo, subió a sus redes diferentes posts de otras pizzerías de A Coruña, Otero ha hecho un vídeo poniendo en valor otros comercios de ropa, Pinocchio apoyando a otras jugueterías. Negocios como Maow, Arena Confecciones y Lencería La Ilusión también nos han animado, además de los que hemos mencionado en la campaña, como Farinarium, Santa Cruz o Berna. ¡Habaziro incluso nos ha mandado crostatas!”, explica Kindergarten.
La campaña también sirvió para que las ventas de Tahona esta Navidad aumentaran más de un 15% a pesar de la situación actual de la hostelería, “lo que demuestra que la creatividad, apoyada por una buena estrategia, vende”.
“Y lo más importante, la gente. Nuestros clientes nos han felicitado y otras muchas personas de forma espontánea nos han apoyado en redes sociales con comentarios muy emotivos”, recalca Kindergarten.
