El Código Deontológico del Diseño, el primero que tiene el colectivo, se aprobó en la Asamblea General de READ del mes de marzo tras ocho años de trabajo
REDACCIÓN
Un total de 52 artículos dan forma al primer Código Deontológico del Diseño en España, aprobado por unanimidad el pasado mes de marzo y es que, por increíble que parezca, hasta ahora el colectivo carecía de un mecanismo de autorregulación que sí posee la mayoría de las profesiones.
El artículo 8 del texto recién aprobado dice lo siguiente: “Las personas asociadas a READ actuarán conforme a la profesionalidad, ejerciendo su actividad con rigor, capacidad, esfuerzo, conocimientos, altas competencias, autonomía y servicio público; haciendo el bien y evitando males a quienes tengan algún tipo de implicación en el proceso de diseño”.
El rigor, la autonomía y el conocimiento que protagonizan este artículo son tres características muy valoradas a lo largo del documento, donde el sector deja muy claro qué valores morales deben regir el ejercicio de la profesión. El código deontológico también es muy explícito respecto a las buenas prácticas que todas las personas implicadas en el proceso creativo tienen derecho a exigir.
Ocho años de trabajo
El documento ha visto al fin la luz tras un proceso de trabajo arduo que comenzó en 2014 con la constitución de un grupo encabezado por el diseñador, docente y filósofo Toni Mañach-Moreno. Ocho años después, se concreta en un conjunto de normas tras haber comparado 24 códigos deontológicos de asociaciones de todo el mundo y después de estudiar qué hacían otros profesionales. En su elaboración también se consultó una extensa bibliografía sobre aspectos como la ética aplicada y los procesos participativos.
El sector decidió llenar las lagunas morales y éticas de la profesión con sus propias normas y con el propósito de agitar conciencias, tal y como refleja el propio documento, en vigor desde hace apenas dos meses. De este modo, promover una actitud analítica e impulsar el debate crítico que ayude a consolidar una cultura ética del diseño es uno de los objetivos de la Red Española de Asociaciones de Diseño.
“Una de las vías que existen para defender la profesión es debatir sobre la misión y la visión de las asociaciones y sobre los principios y valores éticos del diseño, y reflejar las conclusiones de estos debates en diferentes tipologías de documentos”, indica la entidad.
Seis pilares
Seis son los pilares sobre los que se construye el código deontológico del diseño español: sostenibilidad, crítica, compromiso, respeto, creatividad y resiliencia.
Así, las personas asociadas a READ serán rigurosas en el ejercicio de su profesión, promoviendo la calidad, la exigencia, la tenacidad, el esfuerzo, la búsqueda de lo óptimo y la voluntad de mejora. Es uno de los principios generales de la ética aplicada al diseño, recuerda el texto, que tiene especial cuidado en cuestiones relacionadas con los procesos y pasos que implican el desarrollo de los proyectos, incluido todo el ciclo de vida de los diseños.
El texto es muy explícito sobre las buenas prácticas que deben respetar todas las personas implicadas en el proceso creativo
Principios como la imparcialidad, la equidad, el equilibrio y la proporcionalidad entre personas y en el uso de los recursos limitados también se protegen en el código deontológico, al igual que la confidencialidad de todas las informaciones y los datos adquiridos durante el trabajo que puedan dañar “la reputación, el honor, afectar a la propiedad intelectual/industrial o suponer una desventaja respecto a otros implicados en la profesión”.
En tres niveles
El código deontológico de READ está estructurado en tres niveles. El primero engloba los artículos del 1 al 5 y recoge los principios de las éticas aplicadas y los convierte en reglas y permite analizar la práctica profesional, saber si una decisión tomada por un profesional cumple los estándares éticos básicos.
READ pretende promover una actitud analítica y potenciar lo que denomina la cultura ética del diseño
El segundo nivel, del artículo 7 al 13, hace explícitos los principios generales que tienen todos los códigos deontológicos: cumplir con la legalidad, la profesionalidad, la confidencialidad, la fidelidad a responsabilidades concretas, la buena fe, evitar conflictos de intereses y el respeto hacia todas las personas implicadas en el proceso de diseño.
Por último, el tercer nivel (del 14 al 52) es una guía de comportamiento, reglas que pretenden promover las buenas prácticas y evitar las malas prácticas en diseño.
