Cinco razones por las que la refabricación será tendencia

Profesional de Canon trabajando en la refabricación de una impresora en su fábrica de Giessen, Alemania. Imagen: Canon.

Canon analiza y expone las grandes ventajas de optar por la refabricación en vez del reacondicionamiento


REDACCIÓN


La sostenibilidad se ha convertido en una temática de absoluta prioridad, por lo que llevar al mercado dispositivos tecnológicos más respetuosos con el medio ambiente es una necesidad. Las empresas no solo deben tener en cuenta la huella de carbono de un dispositivo durante la fase de uso del producto, sino en todo su ciclo de vida.

En este contexto, se hace cada vez más patente la apuesta por dispositivos refabricados y reacondicionados, aunque aún existe mucha confusión entre estos dos modelos. Canon analiza las diferencias entre ambos y expone los grandes beneficios de la refabricación frente al reacondicionamiento.

Refabricar: más allá de una limpieza exhaustiva

El proceso de reacondicionamiento implica la redistribución de los productos, normalmente electrónicos y eléctricos que se han devuelto previamente a un fabricante o proveedor. Supone desde llevar a cabo unas sencillas pruebas hasta efectuar una limpieza y una reconstrucción exhaustivas del producto.

A diferencia de los productos de segunda mano, los productos reacondicionados se someten a pruebas para garantizar que su rendimiento y funcionamiento son correctos.

No obstante, con la refabricación se va más allá, los productos refabricados no deben entenderse como productos «usados», «reacondicionados», «reparados» ni «reutilizados». En su lugar, hablamos del proceso de recuperar, desmontar, reparar, sustituir y limpiar componentes para volverlos a vender con la misma calidad, rendimiento y especificaciones que un producto nuevo.

Mismos estándares de producción que un producto original

La diferencia entre los productos reacondicionados y los dispositivos refabricados es el rigor, la estandarización y la integridad del proceso de fabricación. Una máquina refabricada se vuelve a producir con componentes individuales para satisfacer las mismas expectativas del cliente que las de las máquinas nuevas. Esto es posible volviendo a fabricar un producto según las especificaciones del producto original, combinando piezas nuevas, reparadas y reutilizadas.

En busca de una mayor calidad para el dispositivo final a través de la refabricación

Aunque el proceso de refabricación es más costoso que el reacondicionamiento, el resultado final es un producto de mayor calidad, lo que se debe en parte a la exhaustividad del proceso. No obstante, la refabricación sí que ofrece un ahorro al consumidor, ya que es habitual que un producto refabricado cueste menos que uno nuevo y ofrece todo lo necesario en un equipo multifunción para satisfacer las necesidades de los clientes.

Productos más sostenibles con el medio ambiente

Canon estima que el 60 % de la huella de carbono procede de las primeras fases de fabricación y abastecimiento de materias primas. Con el modelo de refabricación se consigue eliminar muchas de las emisiones producidas en estas primeras fases, además si se tienen en cuanta otros factores como el transporte de materiales para la producción de un nuevo producto, la reducción de emisiones también es considerable.

Las empresas deben tener en cuenta la huella de carbono de un dispositivo durante todo su ciclo de vida

Hacia la economía circular

La refabricación se torna como una propuesta industrial que encaja a la perfección con el nuevo e innovador modelo de economía circular, lo que permite avanzar en la consecución de los objetivos de la Comisión Europea recogidos en el Plan de Acción de Economía Circular.

Este modelo puede desbloquear nuevas fuentes de ingresos para las empresas, reduciendo los costes asociados a la obtención de nuevas material primas o el reciclaje de antiguas, al tiempo que atrae a los consumidores dispuestos a pagar por productos que sean respetuosos con el planeta.

Un claro ejemplo de esto es el de Canon y su fábrica alemana de Giessen, donde dan una segunda vida a los equipos de impresión que mejor comportamiento han tenido en el mercado. “Estos dispositivos, bajo el nombre de EQ80, contribuyen a la economía circular al reutilizar parte de los materiales originales. Esto maximiza el valor extraído de los materiales y contribuye a reducir los residuos y la cantidad de CO2 generados en el proceso de abastecimiento de materias primas, producción y transporte de un nuevo dispositivo”, ha asegurado Mª Jesús Arroyo, product manager de Canon España.

Artículo anterior

¿Quieres rentabilizar tu inversión publicitaria?

Siguiente artículo

¿Es ya el banner un formato “Mainstream”?